NUESTRA HISTORIA

La colección comienza a integrarse hace 55 años hasta hacerse significativa y reclamar un espacio museal, que se obtiene al ganar un concurso abierto organizado por la Alcaldía del municipio de Zipaquirá y el Instituto de Fomento Industrial (IFI- Concesión Salinas) titular de los derechos de propiedad del inmueble en que hoy opera; al que fueron presentadas la colección de la familia Obregón Vargas.
Recibido el inmueble como ganadores de la convocatoria concursal, se adecúa con un mínimo de intervención, y preservando íntegramente su estilo y su armonía con el entorno, para establecer sobre el inmueble el Museo Arqueológico de Zipaquirá.
Producto del acopio paulatino, de la recuperación de muchísimas otras y del recibo de varias donaciones de piezas arqueológicas, correspondientes a 22 culturas precolombinas tras varios años de funcionamiento y consolidación hoy proyecta la ampliación de su sede al servicio del Museo Arqueológico, de la cultura y del turismo.

La importancia del museo

ATRACTIVO TURISTICO

El Museo Arqueológico se erige como uno de los más importantes atractivos del municipio y región, al servicio de los visitantes atraídos principalmente por la Catedral de Sal, pero que aspiran poder hallar motivos adicionales para suplementar la visita.
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Proyecto de Ampliación

Actualmente la Fundación de Arte y Cultura que prohíja el Museo Arqueológico, concentra sus esfuerzos en la ampliación del Museo Arqueológico, y la dotación de nuevas áreas para la atención de servicios culturales mediante el proyecto denominado “Centro de Integración Cultural”

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